Esto último es lo que os vengo a contar hoy. Sabéis lo que es? Para mí ha sido todo un descubrimiento y estoy realmente emocionada y enamorada de este material.
El curso fue grabado por Neox y el 2 de Marzo saldremos en la tele!! Qué vergüenza pasé... pero mereció muchísimo la pena.
Como su propio nombre indica es un plástico. Hasta ahí todo correcto. Nos dieron dos trozos de 10x13 cm a cada uno y enseguida nos pusimos a pintar. Lo primero es ver cual es el lado "bueno" por el que se puede colorear. Hay uno que esta como plastificado y otro que es muy suave, como pelito. Es por este último por el que se pinta.
Aunque hay diferentes colores de plástico, en el taller usamos el transparente. Así que lo pusimos encima de un dibujo y empezamos a calcar. Luego hay que colorearlo con pinturas de madera o con rotuladores permanentes. Si elegís los rotulador hay que lijar la superficie para que no se expanda la tinta.
Una vez que tengas el dibujo acabado se recorta con mucho cuidado, porque se puede rajar el plástico, y, con una troqueladora, hacemos el círculo para la cadena. En el caso de arriba hice dos círculos porque me gustaba más.
Ahora viene lo sorprendente. Lo metemos en el horno (previo calentamiento a 180º) y veremos como se empieza a retorcer y a encoger. Disminuye 7 veces su tamaño original y se vuelve muy duro!! Así que si hacemos un dibujo muy pequeño es posible que nos quede mejor para unos pendientes que para un collar.
Para quien lo tenga en casa, también se puede hacer (que es como lo hicimos en el curso) con un secador de embossing. Son unos secadores especiales que dan mucho calor pero no tienen aire.
Os recomiendo que os metáis en el Facebook de Fábrica de Texturas y echéis un vistazo a los vídeos. Mil gracias por invitarme a este curso! No os imagináis lo que me gusto.
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